¡Hola ratoncillos de biblioteca!

Os traigo otro final de bilogía, que este año estoy muy de leer libros con continuación…cuando a mi me encantan los libros autoconclusivos. ¡Allá vamos!

SOBRE EL LIBRO

seremos recuerdos

Autor: Elísabet Benavent

Editorial: Debolsillo

Año: 2018

Páginas: 536

¿Es una serie? Canciones y recuerdos 2

ISBN: 8466346503

Calificación:
3.5/5

SINOPSIS

Macarena ha conseguido poner su vida y su trabajo en orden.
Macarena cree que Candela es la ayudante que necesita.
Macarena empieza de nuevo.
Leo sigue presente… como amigo.
Y mientras Macarena vuela…
Jimena se obsesiona con el pasado de Samuel,
Adriana no puede seguir luchando contra ella misma.
Porque las canciones que fuimos se convierten en pasado.
Porque los recuerdos que seremos son el futuro.

RESEÑA

Pues tal y como me pasó con el primero, me costó bastante cogerle el ritmo a este segundo. Sufrí un bloqueo lector importante, y entremedias me leí la trilogía Grisha, la bilogía de El Juego de la Corona… así que imagina. Y además, estaba con resaca de la serie-adaptación de En los zapatos de Valeria, que me súper encantó, y la serie en cambio me dejó un poco desinflada…

Pero por fin, le encontré el puntito al libro. Así como el primero había sido un torbellino de idas y venidas entre los personajes, el segundo es un libro más reflexivo. Entre tanto, disfrutamos de las salidas de Jimena y podemos ver un poco más de su historia secundaria y también de la historia de Adriana, que se quedó muy pero que muy interesante en la primera parte.

Me ha gustado ver a una Macarena más centrada, menos vengativa, más de ella y menos de Leo….aparentemente.

Benavent también potencia mucho (aunque quizá no tanto como en la primera parte) la situación laboral de Maca, que va viento en popa hasta que se topa con la tramontana. Por fin consigue a su ansiada ayudante para compartir los sufrimientos y torturas a las cuales le somete Pipa, su jefa influéncer. Pero Candela, la adorable y supuestamente inocente ayudante, le complicará un poco la vida. Así que Benavent nos da el toque cómico, por así llamarlo, a través del mundillo de la moda y todo lo que se encuentra detrás de las redes sociales hoy en día. Lo que vendría a ser el punto de fuga de la parte dura del libro, que es la nueva relación que Maca tiene con Leo.

Por otra parte, Leo también nos vuelve muy maduro, ha cambiado muchísimo desde el primer libro y a través de las palabras de la autora podemos ver que tanto él como Maca están en este punto por puro cansancio. Un cansancio con el que cualquiera de los lectores nos podemos ver reflejados en algún momento de nuestras vidas. Porque si algo tiene Elísabet, es que es tan clara y tan fiel a la realidad que a veces asusta.

Sin embargo, a pesar de todos los puntos buenos, de la Maca que busca rehacer su vida y del Leo que intenta ser un buen chico con otra mujer igual de increíble (Raquel, la amiguísima de Maca), creo que la narración ha sido excesivamente larga. Para hacernos entender el punto de la nueva naciente relación entre los protagonistas podría haberse hecho en menos páginas, sobre todo al principio del libro. El estilo de Benavent la delata, es muy clara siempre y aunque intente darse algún rodeo, ya sabemos de qué pie cojea y por donde van a salir los tiros. Yo siempre me quejo de su previsibilidad, a pesar de que sus historias siempre acaban como quieres que acaben. Sin embargo, esta vez nos ha premiado (o no, dependiendo del ojo crítico que la lea) con un final con un desarrollo muy muy distinto, a la vez que podría decirse necesario.

Si el objetivo de Elísabet era presentar un personaje principal totalmente evolucionado, con Seremos recuerdos la ha clavado. Y la verdad, hasta cierto punto resulta alentador.

A partir de aquí, podéis encontrar una alerta de spoiler. Podéis bajar hasta el siguiente aviso para leer el resto de la reseña.

SPOILER ALERT

Fue todo un acierto decidir mantener alejados a Maca y Leo prácticamente todo el libro, salvo esos pequeños deslices con los que Benavent nos premiaba y que no dejaban que se apagaran las ascuas entre ellos. La fiesta-desastre en México (de viaje con Pipa y Candela) y la posterior oferta de trabajo con inclusión de mudanza por trabajo me descolocaron un poco, la verdad. Dejar a Leo…es lo último que pensaba que iba a pasar. Y no sólo por eso, sino porque en la propia narración de los hechos del final del libro, Benavent ha querido ser tan fina, tan sutil, decir las cosas sin decirlas… que tuve que leerme el último capitulo dos veces para entenderlo. Todo demasiado poético para mi gusto, aunque no dejaba de ser bonito. La autora se marca una de sus legendarias reflexiones sobre el quererse a uno/a mismo/a para saber elegir después qué te hace bien y qué te hace mal. Lo cual a cierta edad, da mucho que pensar. Sin embargo, al haber estado todo el libro realizando divagaciones sobre estos temas, al final resulta un alivio que por fin termine.

E incluso en esta parte con spoiler, no voy a contarte qué pasa al final 😉

Algo que me gustó mucho también es la reconciliación de Maca y Pipa. Creo que es una relación en la cual Maca dio mucho de sí y Pipa era demasiado ella misma y demasiado miedosa para abrirse totalmente a Maca, aunque ésta última también cometió algún error prejuzgándola. Creo que Benavent les dio un buen final.

En cuanto a Adri Jimena, sus finales eran previsibles a la vez han sido historias bonitas y divertidas, introductorias de preguntas sobre parejas bisexuales o personas homosexuales, casadas heterosexualmente, que no saben que lo son y viven infelices. Sobre todo por el qué dirán. Y aunque se me hizo un poco rara la mezcla de temática, sobre todo teniendo en cuenta que ellas dos afectadas son las dos mejores amigas de Maca y por lo tanto tienen bastante protagonismo, sí que creo que el mensaje es muy fuerte: da igual lo que la gente piense. Incluso hasta cierto punto, da igual lo que uno mismo pueda llegar a pensar. Debemos liberarnos de esos pensamientos que nos oprimen u oprimen a los demás. Hay que ser libres.

SPOILER FREE

En conclusión, creo que nos encontramos con un tipo de novela no tan pensada para el público para el cual Benavent venía escribiendo hasta ahora. Las que leímos a Sílvia y Valeria hace un tiempo hemos crecido igual que ella, así que sus libros son un claro reflejo de esa madurez de la propia autora. No son los libros que más me han gustado, pero sí que han conseguido engancharme lo suficiente como para tener ganas de ver qué pasaba al fin con nuestros queridos Maca y Leo. Al final, la pluma de Benavent gana, su estilo fino, su narración tan bonita y acertada… hace que todo sea una delicia muy fácil de leer y de adentrarte en la historia.

Por muchos libros más, Elísabet.

¡Nos leemos pronto!

Miriam

Lo mejor:

  • Lo reflexiva que se vuelve a lo largo de todo el libro, nos muestra un cambio de Benavent, una evolución notable en su propia persona, porque con cada libro, nos deja un pedacito suyo.

Lo peor:

  • El libro se hace un poco eterno, podría haberse contado la misma historia con 100 páginas menos.