Hobbies. 

Llevo años sin aburrirme. Y no es una forma de hablar. Creo que la última vez que utilicé la frase «estoy aburrida» tenía 7 años y estaba sentada a las cuatro de una sofocante tarde en la caravana, obligada a echar la siesta mientras todos mis amigos del camping estaban por ahí. 

Creo firmemente que la gente necesita tener aficiones. Tu mente se mantiene siempre ocupada y además puedes combinarlos. Por ejemplo, yo leo y tengo de fondo alguna película que ya haya visto. O también puedo coser, hacer punto de cruz o crochet mientras escucho un pódcast. Y si no, admiro mis estanterías. Las ordeno. Dibujo. Diseño cosas en Canva, para mi paz mental. Veo series y películas. Juego a videojuegos. Vuelvo a admirar mis estanterías. Quedo para ir de librerías con mis amigas. Incluso tengo un buen grupo de amigas con las que compartir esas lecturas, con las que emocionarnos por tal o cual personaje, por sufrir porque ese libro es lo más dramático que hemos leído en nuestra vida o porque tal editorial ha dejado a medias una saga. 

He convertido todo aquello que me gusta en una afición. Sin embargo, algo con lo que pensaba que no iba a tener problemas, lleva un par de años angustiándome. Porque quiero hacerlo TODO. Y como ya sabéis, a todo no se llega a no ser que puedas desdoblarte en 7 personas y puedas hacer que los días tengan 50 horas, porque por desgracia hay que trabajar, comer y dormir. Así que todas las frustraciones, sobre todo relacionadas con los libros ya que ocupan un 70% de mi existencia, se iban acumulando. Hasta que llegó la semana trágica y estábamos tod@s al borde del colapso mental por culpa de cierto libro. Y por fin, gracias a esa situación, creamos Literariamente Histéricas, el pódcast en el que mi amiga @about_booksandshows y yo, juntamos cine, series, libros y frustraciones varias de nuestra vida en un solo lugar. 

Así que después de un montón de tiempo sin pasarme por aquí, con muchas intenciones de también integrar este hobby -el de escribir en mi blog- a mi 2024 de forma constante, vengo a presentaros esa vía de escape, esos momentos de risas y de fangirleo con una amiga que me permite juntar todas esas cositas que me gustan tanto en mi vida y darles vida, crear algo de lo que me siento orgullosa y que, de alguna u otra forma, pueda ser también la vía de escape de quienes nos escuchan. Bienvenid@s a Literariamente Histéricas.